inmersión iii
un espesor de miedo, denso y fatigado, ahoga el desierto. aun una hoja mellada, aun mi flecha roma, podría abrir esta cortina de sofoco. bajo la acacia, a su sombra, miro mis pies de polvo, encallecidos. mi huella en la duna se aligera, la suya en mí avanza constante. tengo la raíz en la planta prendida.
4 huellas
demasiadas ramas y poca raíz
por eso se confunde el hombre
y la mujer se ahoga en el desierto.
caminantes.
(un abrazo,
Dd)
sí, dd, la savia se dipersa
y la fuente no es suficiente.
un abrazo,
bosquimano
que piensa en podarse
podarse estaría bien
antes de que las ramas se enreden
y no nos podamos mover
y entonces el miedo
y entonces el sofoco
la duna se mueve más rápido que nosotros
podarse algo tiene de mutilación
y sin embargo
sólo con límites somos libres
sólo con límites fluye el aire
respiramos
sí, la duna se mueve más rápido
cuando somos nosotros
los de la prisa
los de la vida corta
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